Los residentes en Ca’n Granada cuentan con servicio de control médico y enfermería, comedor y ‘room-service’, actividades como canto, baile o pilates
Cristina Sierra llegó de Argentina hace aproximadamente un año. Sus hijas vivían en Mallorca desde hace mucho tiempo y tras el fallecimiento de su esposo, consideró que era el momento para dejar de trabajar y reunirse con ellas para poder disfrutar de la vida y de sus nietos.
Nada más llegar, encontró un apartamento junto al mar, en una zona costera próxima a Palma, pero se encontraba sola, le costaba relacionarse con las personas de la zona y no estaba feliz. Unos problemas de salud, le llevaron a Ca’n Granada donde inició un tratamiento que iba a durar tres meses y a la finalización del mismo retornaría a su casa en la playa.
Pero todo cambió cuando cruzo la puerta de su nuevo apartamento. En Ca’n Granada encontró aquello que le faltaba desde su llegada a la isla. Empezó a relacionarse con el resto de residentes, personas que se preocupan por los problemas de los demás, con los que comparte actividades, zonas comunes y uno de sus placeres, la comida. Nos cuenta Cristina que “El comedor es una zona clave aquí. El hecho de compartir este momento nos lleva a una proximidad envidiable y nos facilita mucho el día a día”. También le encanta el hecho de saber que cuenta con asistencia médica diaria y el seguimiento que realizan los empleados.
En una jornada normal, y tras haberse aseado y desayunado, Cristina sale cada día a caminar. A la vuelta, descansa y disfruta del almuerzo. Por la tarde, participa en las actividades del centro y cada día se desenvuelve mejor con el Pilates, por ejemplo. Con estas actividades, los residentes se relacionan y se divierten al mismo tiempo.
Le encanta cuidar a sus nietos y aprovecha la ubicación de Ca’n Granada para llevarlos al cine andando o a alguno de los parques ubicados en las proximidades.
Como dice siempre Cristina, “en todas las etapas de la vida se aprende y estoy aprendiendo mucho de todas las personas que conforman la gran familia de Ca’n Granada”.
Así es una experiencia de vida en el complejo residencial Ca’n Granada, compuesto por 51 apartamentos, en el que cada vecino tiene a su disposición un amplio conjunto de servicios, espacios y actividades a la carta (servicio de control médico y enfermería, comedor y room-service, actividades dirigidas -canto, baile, pilates, ejercicio físico, entrenamiento de memoria…-, limpieza profesional diaria de la vivienda, etc.), para que pueda escoger aquel estilo de vida que encaje a la perfección con sus inquietudes y necesidades.